Deadpool vol 6

UPC-PO termina de tapar la fosa común en la que han enterrado a los miembros de la Agencia de Cronodivergencia que Masacre ha matado. La situación intranquiliza al código de barras viviente, pero Masacre lo calma. La mayoría de las portadas promete cosas que nunca ocurren en las páginas interiores, así que es improbable que nadie se de cuenta de lo que ha pasado. Masacre propone esconderse en los 90, pero UPC-PO opila que lo mejor es a finales de la Era de Bronce.

Solo se sentía enganchado al dinero fácil, así que cuando dejó de conseguir trabajos aquello dejó de ser divertido. Tras dejar embarazada a Catita, las facturas empezaron a amontonarse así que decidió hacerse pasar por Masacre. Su misión consistía en proteger a un embajador que viajaba a Washington D.C. para iniciar unas conversaciones de paz y poner fin a una guerra. Solo no tardó en darse cuenta que era una encerrona al descubrir a varios hombres de los servicios secretos caídos. Así que se teleportó hasta el coche del embajador y logró salvarle la vida cuando varios francotiradores dispararon sobre él. El mercenario logró llevarlo hasta una furgoneta en la que escaparon, pero dos coches de los servicios secretos fueron tras ellos. Al parecer los hombres habían sido manipulados mentalmente y todavía intentaban matar al embajador. Teleportándose al interior de los coches logró acabar con los perseguidores y poner a salvo al embajador. A raíz de ello obtuvo gran difusión y reconocimiento como héroe, aunque todos los méritos fueron a parar a Masacre.

Después de que su plan para inculpar a Masacre de la muerte del embajador fracase, el Capi Loco decide enrolarse en el grupo de mercenarios que está formando presentándose en Nueva York para que lo aceptaran como miembro del grupo alegando que se había reformado.

Masacre sorprende a su grupo robando en el banco. El Exterminador de Tontos salta sobre él por sorpresa, pero lo único que consigue es caer los dos dentro de la cámara acorazada junto al resto del equipo y que la puerta se cierre quedando todos atrapados en su interior. Masacre acusa al grupo de quererle robar y ellos de darles condiciones de trabajo abusivas. El dinero que está obteniendo con las misiones no se corresponde con lo que les ha estado pagando. Analizando como han llegado a esta situación, Solo empieza a contar la misión que hizo suplantando la identidad de Masacre. Entonces llegan a la conclusión que fue el Capi Loco quien intentó manipular a los agentes del servicio secreto para endosarle el muerto a Masacre y como no lo logró, entonces se unió al grupo para intentar destruirlo desde dentro.

Un hombre anda a través del bosque en plena noche. En su abdomen tiene incrustado al Capi Loco quien le obliga a hacer algo que el hombre no quiere hacer bajo la ameanza de cortarle el flujo sanguíneo al corazón.