Friendly Neighborhood Spider-Man vol 2

Peter lleva a MJ hasta lo alto del Edificio Chrysler balanceándose con las redes. Para que nadie la identifique le ha pedido que se ponga un traje de Spiderman como el suyo. Allí ven el amanecer mientras desayunan y se acurrucan uno junto al otro por el frío matutino.

Peter llega tarde al apartamento de su Tía May. La anciana le asegura que no se acordaba que iba a venir y le dice pide que arregle una bombilla. Ella tiene que salir, pero no le dice donde. Peter se queda intranquilo, así que decide seguirla. Con el traje de Spiderman intenta ir tras ella para ver a donde se dirige y que le está ocultando, pero de camino ve a varios chivos abusando de otro así que decide intervenir y salva a un niño llamado Luis. Al darse cuenta que ya habrá perdido la pista de su tía decide acompañar a los niños en el autobús escolar y darles una charla sobre los abusones.

Kingping está en la puerta del En la puerta del Centro Médico McCarthy anunciando públicamente que proporcionará fondos para el hospital. Una asesora se acerca a May y le pregunta si querría hacerse una fotografía rápida con el alcalde, pero ella se le encara delante de todas las cámaras y le acusa de ser un criminal y un matón y se marcha al interior del centro médico. Antes de ser atendida recibe una llamada de Peter, pero decide ignorarla.

May intenta escribir una carta a Peter para contarle que ha encontrado un bulto y se encuentra en el centro de oncología para hacerse una revisión. Pero termina rompiendo la nota.

Spiderman salta desde lo alto de un edificio. Mientras se balancea por la ciudad y pasa sobre uno de los puentes que llevan al barrio de Two Bridges ve una furgoneta que se ha salido de la carretera a causa de un bache que lleva ya meses sin reparar. Spiderman se acerca, pero antes de que pueda asegurarla con su red, el vehículo pierde el punto de apoyo y se precipita al vacío. Spiderman salta a través de la ventana y salva a sus dos ocupantes. Un padre y una niña. La niña al ver la araña en el traje de Spiderman intenta aplastarla. El padre se disculpa por el comportamiento de su hija y quiere pagar a Spiderman por haberle salvado la vida. Spiderman rechaza y le dice que si quiere, puede donar el dinero a unos mendigos de la esquina de la Tercera con el Bowery. El hombre se ha mudado a Manhattan, así que Spiderman le da la bienvenida a la ciudad, lo saluda y se marcha.

Peter llega a tiempo a su edificio para ayudar a su vecina Marnie a subir las compras. La anciana dice no fisarse de los ascensores y prefiere subir por las escaleras. Una vez en el piso, la mujer pide un favor a Peter. Le pregunta si conoce a Spiderman de haber sacado fotos suyas y venderlas. Cuando confiesa que un poco, le pide que lleve unas manzanas a la vecina del apartamento 72. Le dice que tiene miedo y no sale de su apartamento. Peter acepta y al llamar le abre una mujer que se presenta como Leilani y le pregunta directamente si conoce a un superhéroe, ya que Marnie así se lo ha dicho. Al confesarle que conoce a Spiderman, la mujer no parece que ese héroe pueda ser de gran ayuda. Peter le propone ir a comprar algo para comer mientras hablan del tema. Como Leilani tiene miedo, decide bajar él a coger algo para luego subir. En la calle se cruza con Jose y Gracie, a quienes han dejado una jugosa limosna. Los mendigos están felices e invitan a Peter a un perrito caliente donde Gary. Al regresar al bloque de pisos ve unos coches de época aparcados en la puerta e intuye que significan peligro así que corre al piso de Leilani. Encuentra la puerta derribada y varios hombres vestidos como mafiosos. Al verlo uno de ellos le propia un puñetazo. Peter decide ignorar su sentido arácnido y dejar que le golpee, pero el puñetazo es tan fuerte que le hace perder el conocimiento y atravesar la pared volando. Cuando recobra el conocimiento está junto a Marnie y Randy. Lo han encontrado en ese estado hace ya media hora y no hay rastro de Leilani. Todo su piso ha sido registrado de arriba abajo y está hecho un desastre. Peter dice que va a estirarse un rato y Marnie le entrega las manzanas para que se las lleve. Al entrar en el apartamento se encuentra con su tercer compañero de piso que no es otro que el Bumerang. Fred está en ropa interior haciendo la colada y está usando unos calzoncillos de Peter. Peter le dice que se los puede quedar y entra en su cuarto. Para su sorpresa, Fred le grita que ha dejado la "colada de su vecina". Peter se empieza a poner el traje de Spiderman y se pregunta para que habrá dejado la colada aquí. Cuando va a abrir la tapa aparecen dos niños de piel roja. Spiderman se aparta del susto y cuando se repone les tiende una de las manzanas.