Espada de Frey

En los abismos del tiempo, Lord Frey, Dios de la tierra fértil, era poseedor de la Espada de la Victoria o Espada del Destino. Se ignora quien fabricó esta espada, pero era un arma que era capaz de pelear sola llegando a volar por los aires y que podía atravesar cualquier defensa ya que ninguna sustancia podía resistir su cortante filo, convirtiendo a su portador en invencible, además, la leyenda dice que la Espada no toleraba a los injustos y que terminaba convirtiéndose en su perdición. Frey contempló la hermosura de Herd, el Dios de la tierra decidió hacerla su esposa y envió a su amigo de la infancia, Skrinir, a cortejar a la giganta, para lo cual le entregó su espada mágica como prenda, Skirnir consiguió la mano de Herd para su amigo quedándose la espada como prenda. Sin embargo tiempo después, alguien robó la Espada de Frey y su rastro se perdió con el paso de los siglos hasta el punto que se la dio por perdida hasta que en un momento dado cayó en manos de Karnilla, reina de los Norns, que la ocultó en su arsenal en su castillo tallado en la roca.

En tiempos recientes, Surtur lanzó un ataque contra Asgard y fue necesario que Odín recavara todos los apoyos posibles para enfrentarse al Demonio de Fuego. Como parte de su plan, envió a Balder hasta Nornkeep, hogar de Karnilla, Reina de los Norns, para reclamar la ayuda de hechicera para enfrentarse a Surtur y Karnilla aceptó, pero solo si Balder accedió quedarse junto a ella y gobernar como su rey. Balder aceptó las condiciones y permaneció un tiempo entre los Norns, mientras las tropas de Karnilla ayudaban a los asgardianos en la guerra contra Surtur, guerra en que el propio demonio de fuego y Odín desaparecieron.

La desaparición de Odín animó a los enemigos de Asgard a alzarse contra los aesir, entre ellos Utgard Loki y sus Gigantes de Hielo que decidieron acabar en primer lugar con los aliados de Asgard, entre ellos Karnilla y sus norns. Cuando Balder marchó a Asgard, convocado por Thor al Consejo para decidir el rumbo a seguir por el reino, los gigantes emboscaron a la hechicera a la que capturaron mientras que el propio Utgard Loki hechizaba a los habitantes del reino a los que transformó en piedra. Con el castillo de la Reina Norn a su merced, los gigantes exploraron sus habitaciones y en el arsenal encontraron la legendaria espada de Frey, que fue entregada a Hagen, el mejor espadachín con que contaban los gigantes, tras lo cual regresaron a su reino.

Cuando Balder regresó a Nornkeep acompañado de Agnar, supo del ataque de los gigantes así como el secuestro de su amada por lo que ambos asgardianos marcharon al reino de los Gigantes para liberar a Karnilla. Separados en su camino, Balder logró llegar hasta el castillo de Utgar Loki pero fue descubierto y obligado a combatir en la arena contra Hagen, el cual empuñaba la Espada de Frey.

Balder combatió durante largo tiempo, pero enfrentado a la Espada de la Victoria, apenas si podía defenderse. Sabedor que no podría derrotar a Hagen mientras usara la Espada, Balder urdió un plan, rasgando su cota de malla que convirtió en ariete y la arrojó contra el gigante aturdiéndolo momentáneamente, a continuació arrojó su espada a un lado y la Espada, actuando por voluntad propia, se hizo a un lado destruyendo la espada de Balder, pero dejando una apertura en la defensa del gigante que el asgardiano aprovechó para sujetar los brazos de Hagen hasta obligarle a soltar la Espada, tras lo cual lo noqueó de un certero puñetazo. Balder había salido vencedor, pero Utgar Loki amenazó con matar a Karnilla si no se rendía, en ese momento apareció Agnar y Balder, comprendiendo que no podía escapar sin poner en riesgo la vida de su amada pero sabiendo que no podía dejar la Espada de Frey en manos de los gigantes, lanzó el arma a su aliado el cual huyó de Jottunheim portando el arma.

No se han vuelto a tener noticias de la Espada de Frey pero es de suponer que permanece en manos de Agnar con la que se sabe que rompió el hechizo lanzado por Malekith que le dio el aspecto de Balder, con el objetivo de convertirse en el nuevo monarca de Asgard. De acuerdo a la leyenda, cuando llegara el Ragnarok entre las fuerzas del mal y los asgardianos, Frey se enfrentaría a Surtur, pero al no disponer de su espada mágica sería derrotado muriendo a manos del Demonio de Fuego, es mas, Surtur utilizaría la Espada del Destino para cortar las raíces del Fresno Mundial como parte del plan para destruir los Nueve Mundos.