Vigilante

Fue construido con forma humana por Abel Stack, ante la atenta vigilancia militar. Escapó y formó parte de los Vengadores, pero les abandonó para intentar vivir una vida "humana". El Vigilante le transportó a su hogar para convertirle en el nuevo Vigilante, arrebatándole su forma humana, y devolviéndola a la robótica. Éste era el primer paso de Uatu para encaminar a X-51 hacia sus intenciones. Uatu enseñó a X-51 a usar sus máquinas de vigilancia por él, ya que había perdido la visión. Al mismo tiempo, intentó inculcarle que conceptos como el bien o el mal no existían, a deshumanizarle poco a poco. Sin embargo, X-51 engañó a Uatu. Fingiendo haber borrado de su programación su personalidad humana, consiguió acceso a todos los datos del Vigilante. Fue entonces cuando descubrió el verdadero plan de los Celestiales. Estos habían modificado a la raza humana para que protegiera el embrión Celestial oculto en el núcleo terrestre hasta su nacimiento, en el que destruiría el planeta.

Fue X-51 el que desencadenó los hechos que salvaron la Tierra del embrión celestial que se ocultaba en su interior, avisando a Reed Richards de lo ocurrido. Una vez salvada la Tierra, X-51 se autoproclamó, no Vigilante de la Tierra, sino Guardián (un guardián muy activo). Acto seguido desconectó a Uatu de sus máquinas, que le permitían oír lo que pasaba en la Tierra.

Tres años después, Galactus le visitó en la Luna para saberlo todo sobre Franklin Richards, ya que había sido llamado por Rayo Negro con ese nombre. X-51 intentó alargar la respuesta, ya que el mismo Galactus era Franklin, en el tercer estado de mutación donde los poderes se adaptan a los deseos y creencias de los demás. Finalmente, decidió revelarle la verdad. Pero las máquinas del Vigilante no mostraron el destino de Franklin en esa Tierra, sino su muerte a manos de los Centinelas en "Días de Futuro Pasado". Intrigado, X-51 devolvió la posibilidad de oír la Tierra a Uatu para obtener respuestas. Buscando respuestas por las ruinas de la Zona Azul de la Luna, encontró a la Inteligencia Suprema. Fue a Supremor a quién preguntó acerca de las realidades alternativas. Supremor le mostró a X-51 la fatuidad de salvar la Tierra del embrión Celestial. Las demás Tierras alternativas seguían estando en peligro.

Las dudas acerca de si Mar-Vell estaría obteniendo demasiado poder llevaron a X-51 a buscar a Kyle Richmond, que poseía un fragmento de la consciencia cósmica. Acompañó a la Gárgola en sus últimos momentos, después de descubrir que Mefisto utilizaba los viajes en el tiempo, y las múltiples realidades alternativas para escapar a su juicio al final de los tiempos. Venció a los fantasmas aliados de Belasco en la Tierra Salvaje e impidió que Mefisto manipulara a Inmortus para crear aún más realidades alternativas.

Tras la destrucción de la Muerte, X-51 atrajo a su realidad héroes de otras realidades alternativas para convertirlos en sus Heraldos. Estos héroes fueron Lobezno (de "Días de futuro pasado"), Hiperión, Spidergirl, Deathlok, Killraven, Tormenta de Sangre y Iron Man (del 2020). Creyendo que la clave de la destrucción del embrión Celestial era Reed Richards, viajaron a varias realidades alternativas para avisarle del peligro que corría cada Tierra. Al ver que en algunas Reed Richards no existía, volvieron al hogar del Vigilante. Allí se encontraron con todos los Vigilantes, que habían llegado dispuestos a juzgar a Uatu por revelarse a la humanidad, lo que llevó a la muerte del embrión Celestial. X-51 salvó a Uatu enviando a cada Vigilante a una realidad alternativa, revelándose así el embrión Celestial en cada Tierra, haciendo que cada Vigilante hiciera lo mismo que acusaban a Uatu, y dándoles a todas las realidades alternativas la oportunidad de acabar con su embrión Celestial. Trasladó a los Heraldos a la Tierra, para poder concederles sus mayores deseos.

Cuando el hogar del Vigilante fue invadido por los Guardianes de la Galaxia, fue obligado a revelarles todo lo ocurrido. Obtuvo mayor información que con las máquinas del Vigilante gracias a Kyle Richmond, el hombre 4-D. Como el propósito de los Primigenios del Universo de reconstruir el anterior universo con las almas del Reino de los Muertos, o que Lobezno no era un mutante, sino un humano no modificado por los Celestiales. Fue el hombre 4-D quién le mostró como Excalibur, la espada del Rey Britania, podría vencer a Mefisto, y que debería hacer vérselo al propio Rey Britania cuando pareciera demasiado tarde.

EL Hombre Máquina acompañó a Thor, Loki y Surtur en el Ragnarok, descubriendo que Yggdrasil, el fresno del mundo, era el mapa que Mefisto usaba para viajar entre realidades alternativas. Tras destruirlo Surtur, fue X-51 quién recordó a Thor su verdadera identidad. Después, X-51 quién le dio a Medusa la información que necesitaba para vencer a Mefisto.