Destructor
datos
Destroyer
Destructor
Destructor, arma de Odín, heraldo de Galactus
Odín, Thor, Tarene, Buck Franklin, Loki, Sif, Balder, Lorelei, Maestro, Hulk, Coronel Case
Asgard, Hel, móvil
historia
El Destructor es un traje de combate, que forma una armadura encantada de aspecto humanoide la cual, animada por la fuerza vital de un ser vivo, utiliza sus increíbles poderes, convirtiéndole en un ser virtualmente indestructible. La armadura del Destructor fue creado hace miles de años por orden de Odín, monarca de Asgard y de los dioses asgardianos, a fin de que fuera su arma más poderosa, el arma a utilizar como último recurso.
La idea de crear al Destructor, surgió hace miles de años, después de la llegada de los seres espaciales conocidos como los Celestiales. Los Celestiales habían realizado experimentos genéticos con los antepasados de los actuales humanos, y miles de años después, estos seres espaciales regresaron a la Tierra para comprobar el resultado de sus experimentos, y juzgar si eran dignos de seguir vivos o no. Odín tuvo conocimiento de la llegada de los Celestiales, y reunió a los demás patriarcas de los panteones terrestres, para informarles de la amenaza que venía del espacio. Los patriarcas no estaban dispuestos a permitir que los Celestiales destruyeran a la humanidad, y acordaron enfrentarse a los seres del espacio por la vida de la humanidad en juego. Así, cuando los Celestiales llegaron a la Tierra, los patriarcas salieron a su encuentro dispuestos a combatir si era necesario, sin embargo, los Celestiales probaron que incluso el poder de uno solo de ellos, era muy superior al de todos los patriarcas unidos. En esta primera ocasión, los Celestiales se marcharon de la Tierra, pero no antes de advertir a los patriarcas que abandonaran la Tierra, y dejaran de influir en el desarrollo de la humanidad, y de advertir que volverían varios de cientos de años mas tarde, para volver a juzgar la evolución de la humanidad.
Temiendo que en este nuevo juicio, la humanidad no tendría tanta suerte, los patriarcas decidieron crear un arma que les permitiera combatir a los Celestiales, de ahí surgió la idea de crear al Destructor. Apenas se marcharon los Celestiales de la Tercera Hueste de la Tierra, Odín ordenó a los mejores herreros, artesanos y constructores de Asgard que construyeran la armadura del Destructor, una vez acabada la armadura, los patriarcas de los panteones, como Odín, el griego Zeus, el egipcio Ra y otros, cedieron una porción de su poder para dotar de poder al Destructor, convirtiéndole en la poderosa arma que es actualmente.
Mientras esperaban la llegada de la Cuarta Hueste de los Celestiales, Odín colocó la inerte armadura del Destructor, en el interior de un templo que creó en Indochina, esperando que allí estaría oculto de cualquiera que quisiera usarlo con fines maléficos. Sin embargo, Loki, el dios asgardiano de la mentira, tuvo conocimiento de la existencia de la armadura del Destructor, y buscando vengarse de su hermanastro Thor, maquinó para que la fuerza vital de un cazador sin escrúpulos, Buck Franklin, entrara en la armadura del Destructor animándolo, tras esto, el Destructor se enfrentó a Thor en el interior del templo. Thor fue incapaz de doblegar físicamente al Destructor, y parecía abocado a la derrota, sin embargo, usando el cuerpo inerte de Franklin como escudo, logró que la fuerza vital del cazador regresara a su cuerpo original, dejando el cuerpo del Destructor inerte, tras esto, Thor derribó el templo, enterrando al Destructor y llevándose a Franklin del lugar.
Tiempo después, mientras Loki estaba exiliado de Asgard, introdujo su consciencia y fuerza vital en el cuerpo del Destructor, y de alguna manera, logró controlar la armadura, y usando su capacidad para viajar entre dimensiones, marchó a Asgard dispuesto a acabar con Odín. Sin embargo, el monarca asgardiano localizó el cuerpo de Loki en la Tierra, y lanzó un hechizo contra el inerte cuerpo de su hijastro, que obligó a la consciencia de su díscolo hijo a regresar a su cuerpo inconsciente.
El Destructor fue animado de nuevo de manera inconsciente por la diosa Sif, como parte de un plan de la Reina Norn, Karnilla, y de nuevo Loki, animado por Sif, el Destructor combatió a Thor y al villano de su mismo nombre. Y poco más tarde, fue también animado por la fuerza vital del profesor Clement Holmes, lo que llevó a combatir a este contra Thor y Hércules.
Dado que Thor desconocía los planes de su padre para el Destructor, le entregó el inerte cuerpo de éste a Galactus, el Devorador de Mundos, para que se convirtiera en su heraldo, sustituyendo al Señor del Fuego. Galactus imbuyó al Destructor con una porción de su fuerza vital y lo convirtió en su Heraldo. La labor del Destructor como heraldo de Galactus, fue más bien breve, y solo cabe destacar que encontró para su amo la Contratierra, lo que llevó a un encuentro con la Cosa, de los 4 Fantásticos. El cuerpo del Destructor fue robado de la nave de Galactus por Loki, que de nuevo lo usó en sus planes, primero usando la fuerza vital de Balder, y después del propio Thor. Y poco más tarde, imbuido con la fuerza vital de Sif, se dispuso a impedir por decreto divino de Odín, la entrada de Thor en Asgard.
No pasó mucho tiempo, desde ese momento hasta la llegada de la Cuarta Hueste de los Celestiales. Odín decidió que había llegado el momento de usar a su arma definitiva contra los seres del espacio. Tras absorber la fuerza vital de todos los asgardianos, excepto del ausente Thor, introdujo su fuerza vital (reforzada por la de todos los asgardianos), dentro de la armadura del Destructor, con la peculiaridad que mantuvo su consciencia aún en el interior de la armadura. El Destructor aumentó su tamaño, hasta alcanzar los 2000 pies de altura, y entonces empuñando la poderosa Espada de Odín, construida con el Oro del Rhin, invadió la base de los Celestiales en América del Sur. Se entabló entonces una batalla, entre el Destructor, ayudado por los Eternos que habían formado la poderosa Uni-Mente, contra los Celestiales, con la vida de la humanidad en juego. Sin embargo, a pesar de lo increíblemente poderoso que era ahora el Destructor, fue incapaz de infringir ningún daño a uno solo de los Celestiales, a pesar de sus enconados esfuerzos. Los Celestiales atacaron al unísono al Destructor, dirigiendo contra él rayos de energía que redujeron la armadura del Destructor a un montón de metal fundido, y al parecer acabando con la fuerza vital de los asgardianos. Thor intentó tomar el relevo de su padre en el combate, y empuñando la Espada de Odín atacó a Arishem, el líder de la Cuarta Hueste, pero a pesar de que logró clavársela en el pecho, no le causó ningún daño, es más, asiéndola con las dos manos, la fundió sin problemas. La humanidad parecía condenada, pero entonces apareció Gea, personificación de la Tierra y una de las Diosas antiguas, portando doce jóvenes terrestres, que simbolizaban lo mas perfecto de la humanidad, los Celestiales se marcharon al espacio llevándose a los doce jóvenes, juzgando a la humanidad digna de continuar viviendo. Por indicación de Gea, Thor marchó uno por uno a los Panteones de los demás dioses, para que le cedieran la suficiente fuerza mística para resucitar a Odín, una vez resucitado Odín, el monarca asgardiano devolvió a la vida a los asgardianos regresando a Asgard, mientras que los restos del Destructor quedaban en América del Sur.
Tiempo después, Loki planeó usar el cuerpo del Destructor para vengarse de los Gigantes de Hielo, que habían intentado matarlo tiempo atrás. Loki transportó los restos del Destructor a la Tierra, donde se encontraban los Gigantes de Hielo, y atrajo mágicamente a uno de ellos, Siggorth, hasta el lugar donde se encontraban los restos del Destructor. Al entrar en contacto con Siggorth, el Destructor quedó de nuevo animado. Dado que la mente de Siggorth no era lo suficientemente poderosa para luchar por el control del cuerpo del Destructor, este siguió su programación original, combatir y matar a todo aquel que encontrara. Los Gigantes de Hielo fueron presa fácil del poder del Destructor, el cual, una vez eliminados los Gigantes, volvió su atención hacia la figura inerte que rodeaban sus recientes víctimas. El cuerpo inerte en cuestión, era el cuerpo de Thor, enfundado en una armadura indestructible, y cuyo cuerpo había quedado destrozado tras combatir contra la Serpiente de Midgard, sin embargo, dado que un hechizo lanzado por Hela impedía morir al Dios del Trueno, su destrozado cuerpo aun albergaba vida. El Destructor detectó el rastro de vida en el cuerpo de Thor, y lanzó todo su arsenal dispuesto a matarlo, ya que no reconoció al hijo de Odín, debido a la extraña armadura que portaba. Sin embargo, entre el hechizo de Hela, y la indestructible armadura, impidieron al Destructor cumplir su objetivo.
Entonces se produjo algo inédito hasta entonces, el Destructor actuó quizás por primera vez de manera ajena a su programación, dado que su único punto débil era un ataque contra el cuerpo que le dotaba de fuerza vital, y habiendo encontrado un cuerpo indestructible, y por tanto inmune a cualquier ataque, si lograba hacerse con la fuerza vital del dueño de ese cuerpo, sería invencible. El Destructor se dispuso a absorber la fuerza vital del cuerpo de Thor, y cuando lo hizo, se dispuso a doblegar la voluntad de su huésped, para así tomar el control de su cuerpo. Sin embargo, se produjo una lucha de voluntades, entre el Dios del Trueno y el Destructor, batalla en la que Thor resultó victorioso, haciéndose con el control del cuerpo del Destructor.
Thor, en el cuerpo del Destructor, marchó a Hel, dispuesto a enfrentarse a Hela, para que esta retirara su hechizo que afectaba a su cuerpo. En Hel, el Destructor causó el caos, diezmando las fuerzas de la Diosa de la Muerte, y amenazando con matarla. Desesperada, Hela intentó acabar con el cuerpo de Thor en la Tierra, y así privar al Destructor de la fuerza vital que le animaba. Sin embargo, el Destructor fue más rápido y lanzó un rayo que colocó el cuerpo de su huésped detrás de una impenetrable pared de cristal. Hela atrajo entonces el cuerpo de Thor, prisión incluida a Hel, en el momento en que el Destructor lanzaba uno de sus rayos liberando así el cuerpo del Dios del Trueno, tras esto, sanó a Thor de sus heridas, y le libró de su hechizo, a fin de poder acabar con el cuerpo del huésped. Fue entonces cuando Thor mostró la verdadera identidad de la consciencia que dominaba al Destructor, abandonó el cuerpo de la armadura y regresó a su cuerpo, pero antes, colocó el cuerpo del Destructor detrás de una impenetrable celda de cristal, tras esto marchó de Hel, dejando tras de si el cuerpo del Destructor, como recuerdo a Hela de su fracaso.
Tiempo después, Hela liberó el cuerpo del Destructor de su prisión de cristal, y animado por la fuerza vital de Lorelei, tomó el control de Hel, antes de combatir a Balder, Sif y Gar Toom, y ser encerrado en la Dimensión de las Grandes Bestias.
La siguiente aparición del cuerpo del Destructor involucró a Hulk, el cual se enfrentaba al Maestro, una versión futura y malvada de sí mismo, que había entrado dentro del Destructor mientras su cuerpo se recuperaba de sus heridas. Finalmente, el Maestro fue expulsado del Destructor cuando éste reconoció a Hulk y el Maestro como la misma persona, y absorbió también el alma de Hulk. Fue entonces cuando la voluntad de Hulk forzó al Maestro a abandonar el Destructor. Tras su derrota, el inerte cuerpo del Destructor fue puesto bajo custodia del ejército. Sabedores del gran peligro que entrañaba la armadura, las autoridades vigilaban con esmero al Destructor.
Esto acabó cuando el Coronel Case fue puesto al mando del grupo que vigilaba la armadura del Destructor. Case no creyó las propiedades místicas de la armadura, y tocó esta sin protección, pasando su fuerza vital al cuerpo del Destructor. Case, el cual estaba resentido tanto con la sociedad como con el estamento militar por sus situación actual, encontró eco de sus sentimientos destructivos en los objetivos del Destructor, por lo que la mente de Case era la que dominaba los actos de la armadura, aunque siempre influida por los belicosos instintos del Destructor. El Destructor, dominando por Case, sembró el caos en los muelles, los Vengadores fueron llamados para detener a la amenaza asgardiana, pero fueron incapaces de derrotarlo. La llegada de Thor parecía presagiar la derrota del Destructor, nada más lejos de la realidad, insuflado con la fuerza vital de Case, el Destructor derrotó a Thor, no contento con ello, y decidido a acabar con el Dios del Trueno, usó su arma más poderosa, el desintegrador, y tras abrir su visor, abatió a Thor. El Dios del Trueno quedó al borde de la muerte, pero entre la Bruja Escarlata, cuya magia mantuvo a Thor entre la vida y la muerte, y el misterioso ser llamado Marnot, Thor pudo revivir, aunque unido místicamente al mortal Jake Olson. El revivido Dios del Trueno combatió de nuevo al Destructor, que en su ausencia había abatido a los restantes Vengadores, viendo que no podía doblegar físicamente al Destructor, Thor usó su martillo para abrir un portal a otra dimensión al que arrojó al Destructor. Así, Case quedó atrapado en otra dimensión, en el interior del cuerpo del Destructor, sin necesidad de aire ni de agua o alimento, mientras su cuerpo comatoso era ingresado en un hospital bajo los cuidados entre otros, de la doctora Jane Foster.
El Destructor hubiera quedado allí tal vez de por vida, de no ser por la intervención de Thor. Este marchó en busca del Destructor, a fin de reclutarlo para que le ayudara a combatir a los Dioses Oscuros, que se habían hecho con el control de Asgard, aprisionando a los asgardianos y a Odin. En un principio Case se mostró reacio, pero cuando Thor le dijo que Odín podría devolverle a su cuerpo, Case aceptó ayudar a Thor contra los Dioses Oscuros. Así, el Destructor, Thor y su camarada Hércules, marcharon a Asgard, donde se enfrentaron a los Dioses Oscuros, la intervención de Case fue decisiva para permitir la liberación de Odín y los Asgardianos, y la posterior derrota de los invasores de la Ciudad Dorada. Como Thor había prometido, Odín devolvió la fuerza vital de Case a su cuerpo comatoso, mientras que el cuerpo del Destructor quedaba inerte en Asgard, custodiado por los Asgardianos en el Salón de los Susurros.
Pero el cuerpo inerte del Destructor fue robado por Loki, aliado con Karnilla, con la idea de usarlo para acabar con la vida de Thor. Esta vez, los dos hechiceros decidieron que la fuerza vital que impulsara al Destructor, fuera la de Tarene, la Elegida, personaje de vital importancia para el Universo. El Dios del Trueno luchó contra el Destructor, pero este, imbuido por el poder de Tarene, logró derrotar a Thor, y arrebatarle a Mjolnir. Prevenido por el Vigilante, y viendo que su hijo corría peligro, Odín se dirigió a la Tierra dispuesto a poner fin la combate. Esto no entraba en los planes de Loki, que intentó retrasar el tránsito de Odín de Asgard a Midgard. Mientras, en la Tierra la batalla continuaba, sin su martillo, Thor se transformó en su identidad humana, pero aún así intentó detener al Destructor, aunque sin mucho éxito pese a contar con la ayuda de Sif. Finalmente, la Encantadora, antigua amante de Thor y dispuesta a ayudarle, siguió el rastro de la fuerza vital que animaba al Destructor para encontrar el cuerpo físico de Tarene, en la guarida de Loki y Karnilla. Allí, la Encantadora se hizo con el martillo del Elegido y se lo llevó a Thor. La llegada de Odín permitió a Thor usar el martillo de Tarene para activar el encantamiento que le transformaba de mortal en Dios del Trueno, se entabló entonces una batalla entre el Destructor y Thor. Tarene, pese a no poder hacerse con el control del Destructor, logró impedirle acceso completo a su poder, permitiendo a Thor arrebatarle a Mjolnir, tras esto, Odín uso un encantamiento para devolver la fuerza vital de Tarene a su cuerpo, y de nuevo el Destructor quedó inerte, y llevado a lugar seguro en Asgard.
En los últimos tiempos, Odín expresó su voluntad de destruir al Destructor, ya que el peligro para el que fue creado había desaparecido, y había sido usado demasiado a menudo por los enemigos de Asgard. Balder logró convencerle de que no lo hiciera, ya que podía ser un arma valiosa en el futuro. No se sabe si Odín hubiera llevado a cabo sus intenciones de destruir al Destructor, ya que murió poco después en combate luchando contra Surtur. Desde entonces, el cuerpo inerte del Destructor permanece en Asgard, fuertemente custodiado, esperando que alguna fuerza vital vuelva a animarlo.
Después de la desaparición de los dioses asgardianos, supuestamente muertos durante el Ragnarok, la armadura del Destructor permaneció inerte hasta que se produjo el retorno de los asgardianos, cuyos espíritus quedaron contenidos en huéspedes humanos. Sin embargo, el espíritu de Balder fue alterado por Loki para que, en lugar de residir en un humano, residiera en el interior de la armadura del Destructor el cual, animado por un asgardiano tan poderoso, resultó un rival formidable para Thor cuando ambos se encontraron, siendo que el dios del trueno log´ro alcanzar el espíritu de Balder, el cual abandonó la armadura dejando al Destructor inerte.
Recientemente, el genetista conocido como el Alto Evolucionador utilizó al alquimista conocido como Diablo para que lo ayudara. Sin embargo, el villano español planeaba usar la armadura para sí mismo como un medio para acceder a las múltiples energías del panteón asgardiano, aunque la actuación conjunta de Thor y de Iron Man forzaron a Diablo a abandonar la armadura la cual quedó, una vez mas, inerte
descripción
Variable, normalmente 6 pies y medio, aunque ha llegado a medir hasta 2000 pies de altura cuando estaba imbuido por la fuerza vital de Odín y todos los asgardianos
Variable, normalmente pesa 850 libras, aunque ha llegado a pesar varias toneladas cuando estaba imbuido por la fuerza vital de Odín y todos los asgardianos.
No tiene
No tiene
No tiene
La armadura del Destructor está construida por un metal desconocido de origen asgardiano, y debido a un encantamiento lanzado por Odín, tiene una resistencia muy superior incluso que el Adamantium, o que el Uru, material del que estaba compuesto el martillo de Thor, lo cual lo convierte casi en indestructible.
Normalmente, la armadura del Destructor mide unos seis pies y medio de altura, y pesa unas 850 libras, sin embargo, estas medidas son relativas, ya que en la ocasión en que albergó la fuerza vital de todos los Asgardianos, llegó a alcanzar una altura de 2000 pies.
Nadie puede enfundarse físicamente la armadura del Destructor, entre otras cosas porque no hay manera posible de abrir la armadura de ninguna manera. Para utilizar la armadura del Destructor, una persona debe proyectar su fuerza vital al interior de la armadura, abandonando su forma física que entra en una especie de parálisis.
Normalmente, la transferencia de fuerza vital al cuerpo del Destructor se produce de manera voluntaria (o en todo caso, por parte de alguien que no puede oponerse mentalmente a la transferencia), y algunos místicos expertos, como Odín o Loki, pueden transferir su fuerza vital al cuerpo del Destructor, incluso a grandes distancias.
El Destructor fue místicamente imbuido con la inteligencia y personalidad de Odín, y fue programado para combatir y destruir al primer ser que viera cuando se activara.
Normalmente, cualquier ser humano o asgardiano que entrara en el cuerpo del Destructor, es incapaz de imponer su voluntad a la voluntad destructiva de este. Solamente Thor, Odín y Loki han demostrado ser capaces de doblegar la voluntad del Destructor, e imponer la suya propia, en el caso de Thor, el Dios del Trueno debió combatir duramente contra la propia consciencia del Destructor para lograr el control de la armadura, Odín, como creador de la armadura, no tuvo problemas en tomar el control de esta, y se desconoce como Loki obtuvo el control.
En ocasiones, cuando los objetivos del Destructor coinciden con los de su portador, se llega a una especie de entendimiento cordial entre ambas conciencias para lograr su objetivo, como ocurrió en el caso en que el cazador Buck Franklin entró en la armadura, e intentó matar a Thor.
Cuando el Destructor es animado, permanece unido místicamente con el cuerpo de la persona cuya fuerza vital le anima, de manera que la protege de morir, debido a la falta de fuerza vital, e esa manera, el cuerpo de su huésped, es el único punto débil que puede explotar cualquier enemigo del Destructor, que tenga un poder menor que los Celestiales.
Un hechizo lo suficientemente poderoso, dirigido directamente contra el cuerpo del huésped, puede revertir el proceso, devolviendo la fuerza vital a su cuerpo original, y dejando al Destructor de nuevo inanimado.
La fuerza, inteligencia y habilidades de combate del Destructor varían en función de la fuerza vital que anime su cuerpo, aunque siempre son de un poder enorme, aunque la fuerza vital que le anime sea un mortal, o la propia Elegida.
Los límites de la fuerza física del Destructor no han sido nunca mesurados, aunque es rival físico para Thor (clase 100), y es lógico pensar, que cuando estaba imbuido por la fuerza vital de Odín y de todos los asgardianos menos el Dios del Trueno, su fuerza era aun mayor.
Entre las múltiples habilidades de combate del Destructor, se encuentra la habilidad de volar, la de generar rayos de energía de diferente naturaleza, incluyendo un rayo capaz de desintegrar cualquier substancia, incluido el uru. El Destructor puede lanzar rayos magnéticos, y rayos de calor capaz de fundir cualquier cosa. Puede transmutar y reorganizar los átomos y las moléculas de cualquier objeto, y cambiar la forma y materia de cualquier cosa, siendo capaz de transmutar un objeto sólido, convirtiéndolo en líquido o viceversa.
Pero quizás el arma mas devastadora del Destructor, es el rayo desintegrador, del que se dice que puede aniquilar cualquier cosa, este rayo fue capaz de abatir a Thor, y dejarlo al borde de la muerte, solo sobreviviendo gracias a la intervención de
Marnot.
Para activar este rayo, el Destructor abre su visor, y la fuerza destructora sale a través de esta abertura. El Destructor no puede lanzar estos rayos de manera rápida y continuada, debe esperar un corto tiempo antes de lanzar otro.
Dado que el Destructor no es en realidad un ser vivo, no está sometido al encantamiento de Odín que impide levantar el martillo de Thor a menos que se demuestre ser digno.
En una ocasión, el Destructor usó la mística espada de Odín, para hacer frente a los Celestiales.
El Destructor suele volar por sus propios medios
Cronología
JIM 118~119; T@2, 150~152, 224~225, 228; FF 174-FB, 172~173; T 264~266, 288~289, 300, 381~382, 438/2-FB, 437/2, 438/2, 439/2, 440/2, 441/2, 476~477; H2 461; T2 1~2, 11~13, 36~381276
5.03
03-02-04
Victor
12-07-21
Superlayo, Wolverine