Unicornio

Milos Masaryk era un agente de la inteligencia soviética asignado a tareas de seguridad en el laboratorio privado del inventor Anton Vanko. Vanko estaba involucrado en la creación y desarrollo de armamento de alta tecnología. El primer proyecto que finalizó fue un traje armorizado completo que el mismo vestiría más adelante como el operativo sovietico con el nombre código de Dínamo Carmesí. El segundo proyecto que completo fue un casco y un arnés en los que se integró un rayo ofensivo emisor de radiacciones o "Cuerno de Poder". Vanko ofreció este invento a Masaryk, y con el consentimiento del Gobierno, empezo a instruir a este agente soviético en su uso. Algún tiempo después de que Vanko desertara y huyera a América, Masaryk fue contratado por el Gobierno Soviético para llevar a la Dinamo Carmesí original, Antón Vanko de vuelta a la URSS y así vengar la afrenta causada por el inventor. Para ello se dotó a Masaryk de un traje poderosamente aislante y se le asignó el nombre código de Unicornio debido al cañón de descargas alojado en la cabeza que contenían sus sistemas armamentísticos.Vanko se había pasado al lado americano, convencido por Iron Man. Así, cuando el Unicornio fue a convencer a Vanko para que retornara a la URSS y allí poder descubrir los secretos de la armadura de Iron Man, se enfrentó con el Vengador Dorado, el cual casi le derrota, pero Masaryk logró escapar.

Después de participar en el sabotaje de la boda de Reed y Sue Richards, Unicornio fue contratado durante un corto espacio de tiempo por el Conde Nefaria junto a un grupo de villanos formado por Hombre Planta, Espantapájaros, Anguila y Puercoespín para adquirir fondos que apoyaran sus actividades subversivas. Esto llevó al grupo a enfrentarse con la Patrulla-X. Pero finalmente el Profesor Xavier logró engañar a Nefaria y sus secuaces.

Más tarde volvió a su Checoslovaquia natal para someterse voluntariamente a un tratamiento especial, con el Hiper-Activador experimental que el Gobierno había diseñado para aumentar la fuerza física, que aumentase sus poderes. Sin embargo, el hecho de que Masaryk tardara varios meses en volver con sus superiores, había hecho a estos dudar de la lealtad que este les profesaba. Previamente a ser sometido al tratamiento debió sufrir durante semanas diversos lavados de cerebro antes de que se le considerará apto para someterse al Hiper-Activador. El experimento no solo le dotó de fuerza sobrehumana si no que le liberó de los efectos del lavado de cerebro. Así, tras finalizar el tratamiento, se volvió contra los científicos que le habían tratado y destruyó el Hiper-Activador para que nunca más pudieran crear a nadie como él.

Vistiendo una nueva versión rediseñada de su armamento en forma de cuerno, se alejó, esperando encontrar una cura para el único efecto colateral del tratamiento, una degeneración celular acelerada. Volviendo a América, intentó coaccionar al Congreso de los Estados Unidos con la intención de que le diera los fondos necesarios para investigar las causas de su acelerado deterioro. Iron Man trató de abortar este plan, pero el Unicornio eludió su captura una vez más. Tiempo después fue contratado por el científico soviético renegado Fantasma Rojo, por el Mandarín y por el Hombre de Titanio que le ofrecieron curas a su enfermedad a cambio de diversos trabajos, generalmente enfrentándose contra Iron Man. Tras su batalla contra Iron Man contratado por el Hombre de Titanio Iron Man se apiadó de él, criogenizándolo en un baño químico diseñado para detener su degeneración celular. Mientras estaba congelado el Hombre de Titanio fue deportado a Rusia.

Tiempo después el edificio donde estaba el congelador fue dañado en una batalla entre Iron Man y Látigo Negro por lo que Unicornio despertó, aparentemente curado. Tras enfrentarse a Iron Man y debido al engaño al que fue sometido por el Hombre de Titanio quiso volver a Rusia para vengarse, pero debido a que su capacidad de raciocinio estaba mermada se decidió a ir a través del mar caminando a su encuentro y sin duda hubiera muerto de no ser recogido por sus antiguos patronos que lo internaron en una prisión especial en Siberia, donde fue obligado a combatir contra otros super hombres para ganancia y enretenimiento del alcaide y los guardias, siendo que Mylos se enfrentó a Bucky Barnes siendo apalizado.

Libre, el Unicornio regresó a los USA donde se unió al ejército de villanos reunidos por el Espía Maestro y que intentó colarse en la Torre Stark para saquearla, aprovechando que la mayoría de los aventureros habían marchado al espacio para enfrentarse a los Constructores. Sin embargo, no todos los héroes habían marchado al espacio y Mylos y sus compañeros hubieron de combatir a los aventureros al tiempo que veían como el Espia Maestro (en realidad el oficial conocido como el Capitán Atlas disfrazado), robaba gran parte de las armaduras de Iron Man presentes en la Torre.

Buscando vengase, el Unicornio y sus aliados unieron fuerzas con los aventureros para enfrentarse a los Kree y evitar que robaran la tecnología de Stark.

Posteriormente y al servicio de Korvac, Milos volvió a combatir contra Iron Man junto al Controlador o Ventisca siendo derrotado nuevamente, siendo que la última vez que se tuvo noticias de las actividades del Unicornio, este se había unido a la Legión Letal reunida por el Conde Nefaria tras lo cual no se han vuelto a saber de sus actividades.