Guerra de Aniquilación

Existe un lugar situado en el centro del Universo, se le conoce como el Crujido y es el lugar donde empezó el Big Bang, y es la fuente de toda la materia que compone el Universo. El Crujido y su fuente inagotable de materia, provoca que el Universo se esté expandiendo continuamente, sin embargo la expansión de este Universo provoca que otro punto, en el infinito, se contraiga, en este caso la expansión del Universo "positivo" provoca que la Zona Negativa se contrajera.

Annihilus, soberano de la Zona Negativa, decidió recuperar lo perdido ya que, según sus palabras "nadie despoja a Annihilus de lo que es suyo por derecho de conquista". Para lograrlo, logró aglutinar más de cien mundos bajo su mando, reuniendo un inmenso ejército con el que planeó lanzar su ataque. Sin embargo, no era un ataque contra una raza o un planeta, sino que haciendo gala de su apodo "la muerte que camina", Annihilus declaró la guerra a la vida misma.

Ya que consideraba la vida una amenaza, los objetivos de Annihilus eran más ambiciosos que recuperar territorio, pretendía acabar con toda vida tanto en el Universo como en la Zona Negativa. Sabiendo que todas las cosas de Universo estaban vinculadas por la energía cósmica, Annihilus pretendía manipular a la mayor fuente de energía cósmica del Universo, Galactus, para provocar una conflagración que acabara con toda vida. Para averiguar como manipular la energía cósmica, Annihilus envió a sus tropas de élite, los Buscadores comandados por su lugarteniente, Voraz (todos ellos portadores de la "esencia", el equivalente de la fuerza cósmica en la Zona Negativa) para que capturaran a aquellos que portaban la mácula de Galactus, sus heraldos.

Mientras sus Buscadores buscaban a los Heraldos, él mismo dirigía sus ejércitos hacia el Otroverso (nuestro Universo) dispuesto a recuperar aquello que le habían arrebatado, el paso de tan devastador ejército barrió el Universo como una inmensa ola barre la playa, una autentica Oleada Aniquiladora.

Annihilus y sus ejércitos, dirigidos por las tres concubinas de la muerte que camina, Eradica, Extirpia y Extermina, abandonaron la Zona Negativa a través del Crujido, y a su paso destrozaron las Kyln, unidades generadoras de energía que dotaban de energía a cientos de planeta, y que también servían de prisión de máxima seguridad para criminales de todo el Universo.

La destrucción de las Kyln provocó que cientos de planeta se vieran privados de energía, provocó la muerte de los presos de las Kyln y los encargados de mantenimiento y seguridad de las instalaciones, y, aunque Annihilus no fue consciente en ese momento, liberó a dos de los antiguos proemios, Aegis y Tenebroso, enemigos ancestrales de Galactus.

La Oleada siguió su camino de destrucción, su siguiente objetivo fue el cúmulo Xandar, el objetivo era doble, el Cuerpo Nova actuaba como una especie de cuerpo policial que velaba por la seguridad de todo el Universo, su destrucción evitaría que el Cuerpo Nova pudiera presentar batalla contra la Oleada. El segundo objetivo, Xandar era el planeta natal de dos de los Heraldos de Galactus, el Señor del Fuego y el Caminante Aéreo, Annihilus planeaba atraer a ambos Heraldos para capturarlos y estudiar el uso del poder cósmico.

La Oleada Aniquiladora, dirigida por Eradica, alcanzó el cúmulo Xandar cuando el Cuerpo Nova todavía estaba investigando que había sucedido en las Kyln, todos los Nova de todo el Universo habían acudido al cúmulo, entre ellos el terrícola Richard Rider, alias Nova. En el cúmulo había otra terrestre, se trataba de Cami, una adolescente que había comenzado una extraña relación de amistad con otro antiguo terrestre, Drax el Destructor, ambos se encontraban allí camino de las Kyln, acusado el Destructor de la muerte de una colonia de Skrulls.

Pese a que cientos de miembros del Cuerpo Nova se encontraban en el cúmulo, las fuerzas de la Oleada eran demasiado numerosas y su potencia de fuego era tan devastadora, que no tardarían en ser derrotados. No fue necesaria la batalla, el espacio puerto fue sacado de su órbita y cayó sobre el cúmulo acabando con la vida de todo aquel que se encontrara en el planeta. ¿Todos?, no Drax y Cami lograron hacerse con una vaina que les lanzó al espacio permitiéndoles escapar del impacto del espacio puerto sobre el cúmulo, y Nova, que había sobrevivido al caer enterrado bajo toneladas de escombros.

Nova salió de su entierro, solo para encontrarse con el desolador paisaje de muerte y destrucción en que se había convertido el cúmulo. Entonces fue contactado por la Mundo Mente que la llevó al Nodo. Mundo Mente era portadora de toda la cultura Xandariana a través de los siglos, toda su ciencia, toda su arte, toda su historia, filosofía y tecnología. Además de una fuente conocimiento y saber casi ilimitada, la Mundo Mente era portadora de la Fuerza Nova, el poder que era repartido por todo el Cuerpo Nova.

Dado que el cúmulo había sido destruido, y la Mundo Mente no tardaría en extinguirse, le pidió a Nova que siguiera el único curso de acción que podría salvarle, descargarse en su interior. Pese a algunas reticencias iniciales, Rider aceptó ser el transporte temporal de la Mundo Mente hasta que pudiera ser descargada en un lugar seguro. Ahora Rider, además de contar con el conocimiento casi ilimitado de la Mundo Mente, poseía la Fuerza Nova, pero como solo quedaba él como miembro del Cuerpo Nova, él poseería el total de esta Fuerza, convirtiéndole en uno de los guerreros más poderosos del Universo.

Con su nuevo poder, Nova decidió vengar a todos los caídos, y se lanzó contra la retaguardia de las fuerzas de la Oleada, pese a causar algunos daños, la escasa experiencia de Nova en su nuevo poder provocó que cayera agotado al moribundo cúmulo, es mas, el estallido de energía alertó a Annihilus que se dirigió hacia allí dispuesto a investigar esta energía y a hacerse con ella.

El aturdido Nova fue encontrado en el cúmulo por Drax y Cami, cuya vaina se había agotado finalmente y había vuelto a caer al cúmulo, Drax y Cami decidieron seguir junto a Nova, debido a su poder y convencidos que él conocía la manera de salir del planeta. Sin embargo, Nova temía usar su poder por miedo a perder el control, y hubo de ser Drax quien les condujo hasta una nave en un hangar, permitiéndoles escapar del cúmulo, una vez en el espacio, Nova creo una puerta estelar que les permitió escapar de sus perseguidores.

Casualmente, la nave en que se encontraban salió de la puerta estelar en la órbita de Nycos Aristedes, planeta colonizado por los Aakones. La proximidad de la Oleada Aniquiladora, provocó el pánico en el planeta, y comenzó una evacuación en masa. Para ayudar a la evacuación acudió otro héroe cósmico, Quasar, que se unió a Nova para intentar detener a la Oleada y dar tiempo a los Aakones a evacuar Nycos Aristedes.

Sin embargo, el poder de Nova fue detectado por Annihilus, que acudió a Nycos Aristedes dispuesto a hacerse con su poder, la llegada del soberano de la Zona Negativa fue presenciada por Drax, que avisó a Nova y Quasar, que se dirigieron a la nave insignia del villano, dispuestos a acabar con el problema de raíz.

Sin embargo, el poder de Annihilus excedía el de ambos héroes, Nova fue golpeado y quedó momentáneamente aturdido, y Quasar vio como el poder quántico de sus bandas no afectaban a Annihilus, que mató al vengador cósmico y se hizo con el control de sus bandas.

El sacrificio de Quasar dio a Nova tiempo para recuperarse, y combatir a Annihilus, sabedor que no podría derrotar al villano en combate cuerpo a cuerpo, Rider usó la Mundo Mente para lanzar una orden a las naves de la Oleada, la orden de atacarse entre ellos. Annihilus hubo de abandonar el ataque para poner orden en sus filas, tiempo que aprovechó Nova para escapar y reunirse con Drax y Cami. Desde entonces, Drax se convirtió en el mentor de Nova, enseñándole lo necesario para hacer la guerra y enfrentarse a la Oleada, pronto, la resistencia a Annihilus se aglutinó en torno a Nova como la única fuerza capaz de oponerse a la Oleada.

Mientras la Oleada Aniquiladora comenzaba a hacer sentir su camino de destrucción por todo el Universo, Voraz y el resto de los Buscadores continuaban con la tarea que les había sido encomendada, encontrar a los Heraldos de Galactus. Primero localizaron el cuerpo sin vida de Morg, pero descubrieron que el poder cósmico abandonaba el cuerpo del huésped una vez este perdía la vida. A continuación, el grupo de Buscadores comandado por Voraz localizó al Caminante Aéreo, atraído a Xandar tras la destrucción de su planeta, Gabriel no fue rival para los siervos de Annihilus, que derrotaron al ex heraldo, y se disponían a ejecutarlo tras descubrir que se trataba de un androide. La llegada de Estela Plateada impidió a Voraz acabar con Gabriel, y tras un breve enfrentamiento, Estela huyó del lugar llevando consigo al moribundo Caminante Aéreo, este le habló de la Oleada Aniquiladora y su camino de genocidio, y también le habló de los Buscadores y su caza de Heraldos, tras la muerte de Gabriel, Estela Plateada creó un Agujero Negro donde su cuerpo pudiera descansar en paz tras su marcha.

La batalla entre los Buscadores y los heraldos de Galactus fue presenciada por Thanos, que envió a su lacayo el Caído, para que contactara con Voraz, ambos pactaron un encuentro entre el titán y Annihilus que llevó a una alianza entre ambos villanos.

En otro punto de la galaxia, otro grupo de Buscadores localizaban a Batocromo, otro ex heraldo de Galactus, y de nuevo estuvieron a punto de lograr su objetivo, pero la aparición del Señor del Fuego permitió a ambos escapar en el último momento. Sabiendo que los Buscadores buscaban a los otros heraldos, el Señor del Fuego y Batocromo marcharon en busca de Estela Plateada, al que encontraron enzarzado en una nueva lucha contra Voraz y los suyos, a los que obligaron a retirarse

Si tuvieron más éxito en cambio, los Buscadores encargados de localizar y capturar a otro de los heraldos, Terrax, al que localizaron, combatieron y finalmente derrotaron y llevaron ante Annihilus.

Estela Plateada, Batocromo y el Señor del Fuego continuaron juntos, viajando por el cosmos y protegiendo a los refugiados que huían escapando de la Oleada Aniquiladora, fue protegiendo a los refugiados donde el actual heraldo de Galactus, Polvo de Estrellas, los encontró e hizo saber a Estela Plateada que Galactus solicitaba su presencia. Estela Plateada marchó en busca del Devorador de mundos, y Polvo de Estrellas se unió a sus compañeros heraldos defendiendo a los inocentes del ataque de la Oleada.

En otro orden de cosas, la Oleada Aniquiladora seguía su camino de destrucción, alcanzando los límites del Imperio Skrull. El antaño orgulloso imperio, estaba actualmente dividido en pequeños reinos, tras la destrucción del Mundo Trono y de la Emperatriz y la familia real, ahora decenas de caudillos reinaban sobre estos reinos dispersos de modo que no existía un gobierno unificado que pudiera aglutinar a todos los Skrulls contra la Oleada Aniquiladora, y ante un enemigo de semejante magnitud, un imperio dividido no podía sobrevivir. Decenas de mundos Skrull fueron destruidos ante el paso de la Oleada y una de sus más terribles armas, el Cosechador de Aflicción, capaz de destruir un planeta de modo que pudiera servir de sustento a la Oleada.

Quizás el mayor héroe del Imperio Skrull, el Super Skrull, intentó detener a la Oleada en un mundo llamado Aks'Lo, pero pese a su inmenso poder, nada pudo hacer más que escapar ante el poder del Cosechador. Tras comprobar in situ el poder del arma de la Oleada, el Super Skrull intentó convencer a la Baronesa S'Bak para que enviara a sus tropas para hacer frente a la Oleada, pero esta se negó a exponer a sus tropas lo que le dejaría a merced del ataque de otros caudillos rivales, furioso, el Super Skrull atacó a la Baronesa convirtiéndose en un fugitivo en todo el Imperio y viéndose obligado a huir. Sin embargo no estaba solo, en su huida lo acompañó un joven Skrull, R'Kin, mecánico de naves e hijo de un soldado que sirvió a las órdenes del Super Skrull, y que había crecido oyendo las proezas del mayor guerrero del Imperio.

Juntos el Super Skrull y su nuevo aliado decidieron acabar con el Cosechador de Aflicción antes que continuara destruyendo mundos Skrull, y en concreto Zaragz'Na, el planeta donde vivía el hijo del Super Skrull. Sabedor que necesitaría un ejército e información acerca del Cosechador, ambos viajaron a la Zona Negativa donde descubrieron que el creador de la mortal arma era un inventor llamado Hawal, que actualmente se encontraba en el planeta prisión del nexo de Igoa donde le permitían experimentar con los reos. El Super Skrull marchó al planeta prisión, y tras acabar con los siervos de Annihilus capturó a Hawal, y se dispuso a que este le dijera la manera de destruir el Cosechador. Sin embargo, al acabar con los guardianes de la prisión, había provocado que los reos escaparan, y ahora, liderados por Praxagora, una robot y Preak, un replicante, buscaban vengarse de Hawal, por ello el Super Skrull hubo de combatir contra los reos para impedir que mataran a Hawal antes que le diera la información. Tras derrotar a los reos, el Super Skrull los convenció para que se unieran a él para combatir a Annihilus y aquellos que los habían capturado, formando el ejército que necesitaba para luchar contra la Oleada.

Mientras adiestraba a su ejército y gracias a R'Kin preparaba una flota, el Super Skrull "convenció" a Hawal para que creara un virus capaz de destruir el Cosechador de Aflicción desde dentro, el premio por darle esta información fue la muerte lógicamente. Una vez estuvieron preparados, el Super Skrull, Praxagora y sus aliados abandonaron la Zona Negativa y se enfrentaron a las tropas de la Oleada justo cuando el Cosechador se disponía a destruir Zaragz'na, dejando a R'Kin la tarea de pilotar la nave que debía introducir el virus en el arma.

Sin embargo, el Super Skrull no contaba con la traición de su joven aliado, que los traicionó entregando su nave, y pese a que todos lucharon con valentía, fueron finalmente capturados y encerrados en el Cosechador, al tiempo que eran obligados a ver como el arma destruía el planeta y a todos los Skrulls que vivían en él, incluido el hijo del Super Skrull.

Pese a no poder salvar a su hijo, el Super Skrull si que logró escapar de su encierro y liberar a Praxagora y a Preak, y mientras el replicante mantenía a raya a los soldados de la Oleada, Praxagora marchaba al núcleo del Cosechador dispuesto a destruirlo, y el Super Skrull perseguía y capturaba a R'Kil, dejándole prisionero y a merced de la destrucción de la nave.

Tras esto se unió a Praxagora, y llegaron al núcleo de la nave, donde la robot liberó la enorme energía almacenada en su cuerpo, mientras el Super Skrull absorbía la energía y el calor impidiendo la muerte de ambos. Con el núcleo sobrecargado y a punto de explotar, Praxagora logró llegar hasta una nave de escape con el comatoso cuerpo del Super Skrull, y escapar antes que el Cosechador estallara en mil pedazos, tras unirse a los retazos de su destruido ejército, Praxagora marchó con ellos en busca de aquellos que resistían ante la Oledada.

Por su parte Estela Plateada se reunió nuevamente con Galactus, que le convenció para que volviera a asumir el rol de Heraldo suyo, esperando llevar lejos de la Oleada Aniquiladora al Devorador de Mundos, y buscando minimizar las muertes, Estela Plateada aceptó.

Thanos por su parte, comenzó a demostrar su utilidad como aliado de Annihilus, primero le dotó de tecnología teleportadora, que permitía desplazarse a las tropas de la Oleada de un lugar a otro rápidamente, y les permitía ocupar posiciones en la retaguardia de sus enemigos. Pero su mayor logro fue obtener la alianza con Aegis y Tenebroso, ambos enemigos de Galactus y ambos huidos de las Kyln tras su destrucción por parte de la Oleada Aniquiladora. Viendo en la figura de Galactus un enemigo común, los dos proemios aceptaron capturar a Galactus y entregárselo a Thanos, a cambio que el titán les informara de su paradero. Una vez localizado los dos dioses antiguos combatieron al Devorador y a Estela Plateada y dado que ambos eran por separado igual de poderosos que Galactus, su poder combinado fue definitivo, y finalmente fue capturado y entregado a Thanos y a Annihilus.

La Oleada Aniquiladora por su parte, tras diezmar el Imperio Skrull, puso sus miras en el Imperio Kree, aniquilando los planetas de la periferia. Allí, Annihilus pudo sentir la obra creadora de Glorian en Gothab Omega, un planeta en el que había atraído a seres de gran poder cósmico para usarlos como fuente de energía, para crear su particular paraíso. Annihilus envió a Eradica para acabar con esta nueva fuente de vida.

Entre los atraídos a Gothab Omega se encontraba Ronan el Acusador, recientemente desterrado del Imperio Kree por la nueva casa dominante en Hala, la casa Fiyero, antiguos comerciantes que habían desplazado a la Inteligencia Suprema,. Fiyero acusó a Ronan de aliarse con los Skrulls contra los Kree, y para ello contaron con el testimonio de Tana Nile, una rigeliana.

Persiguiendo a Tana Nile para obligarla a confesar, Ronan llegó a Gothab, donde encontró a otros atraídos por el poder de Glorian, encontró aliados como Korath, antiguo miembro de la Fuerza Estelar Kree, pero también encontró enemigos, como Gamora y sus Gracias, entre las que se encontraban Cereza, Nebula, Stellaris o la propia Tana Nile.

Cuando Ronan derrotó a las Gracias, la propia Gamora entró en combate contra el Acusador, la energía derramada por el combate permitió a Glorian comenzar su obra. La llegada de Eradica y la Oleada Aniquiladora sembró de muerte y destrucción Gothab Omega, solo pequeños núcleos de resistencia se oponían a las fuerzas de Eradica, lugares como el Abismo, donde Ronan y Korath se hicieron fuertes, o el Monte Virago, base de las Gracias, permanecieron firmes ante el ataque.

Ronan finalmente marchó junto a los supervivientes Kree hacia el Monte Virago donde encontró a Tana Nile moribunda, y aunque logró confesar que había declarado en falso contra Ronan, no pudo delatar quien le había ofrecido el trato.

Finalmente, Ronan y Gamora, junto a los Kree y las Gracias supervivientes, abandonaron Gothab Omega, mientras Eradica y la Oleada se enfrentaban a Glorian, el cual usó su enorme poder para diezmar a sus atacantes, aunque le costó perder el juicio al ver su obra destruida.

Ronan, Gamora y los demás se unieron a la resistencia liderada por Nova, que ahora contaba con el apoyo del Imperio Kree y de restos de otros Imperios diezmados por el paso de la Oleada, se desconoce si la unión de Ronan y Gamora se produjo antes o después de la batalla de Tartus Minor. En un planeta periférico del Imperio Kree las fuerzas de la resistencia se enfrentaron a las fuerzas de la Oleada Aniquiladora, pero estas atacaron desde el aire cogiendo a las fuerzas de la resistencia entre dos fuegos, diezmándolas en la que fue, según las palabras del jefe de la resistencia "la derrota más sangrienta de la historia".

En este punto de la guerra, habían trascurrido seis meses desde que la Oleada Aniquiladora había traspasado el Crujido, y en su camino había diezmado cientos de mundos, asesinado a millones de seres vivos, había aniquilado el Cuerpo Nova y había acabado con la inmensa mayoría del Imperio Skrull, además, Annihilus se había aliado con Thanos y había logrado capturar a Galactus, a la espera que el titán lograra usar el poder cósmico para beneficio de la muerte que camina.

Frente a la Oleada Aniquiladora, solo se alzaba la resistencia, comandada por Nova al que se había unido Star Lord al poco de la derrota de Tartus Minor, entre los miles de miembros de la resistencia, se encontraba Drax, que había permanecido junto a Nova enseñándole a ser un gran líder, también estaba Cami, aunque bastante menos eficiente en el aspecto bélico, Ronan, al que los comandantes fieles a la casa Fiyero despreciaban al considerarlo traidor, pero al que las tropas de a pie seguían fielmente, esto mejoró notablemente la capacidad de combate de las tropas Kree pertenecientes a la resistencia (3 cuartas partes de sus miembros) ya que los oficiales a las órdenes de Fiyero mostraban una alarmante falta de motivación, también se encontraba Gamora, fiera guerrera que llegó a tener un romance con Nova, y también los antiguos Heraldos de Galactus que todavía estaban en libertad, el Señor del Fuego, Batocromo y Polvo de Estrellas, que cansados de combatir a la Oleada en solitario, se habían unido a la resistencia dotándoles del necesario fuego en los cielos evitando una nueva encerrona.

Otros imperios como los Shi'ar o los Badoon decidieron permanecer al margen, Titán, planeta natal de Thanos quedaba demasiado lejos del conflicto y la Tierra, planeta natal de Nova, estaba envuelta en una guerra civil y nada sabían de lo que pasaba en las estrellas.

Las tropas de la resistencia retrocedieron hasta que finalmente, en un planeta de la periferia Kree conocido como Daedalus 5, las tropas lideradas por Extirpia se enfrentaron a las ya experimentadas fuerzas de la resistencia, estas se mantuvieron firmes en sus posiciones, retirándose en orden cuando se vieron superadas. Obligadas a retirarse, las fuerzas de la Oleada sufrieron una pérdida aun mayor, cuando el Señor del Fuego se introdujo entre las líneas enemigas, penetró en la nave de Extirpia y capturó a la lugarteniente de Annihilus a costa de ser gravemente herido.

El interrogatorio a Extirpia reveló la captura de Galactus, aunque ninguno sabía para que planeaba utilizarlo Annihilus,.

A Daedalus 5 llegó Phyla, que informó a Drax que Thanos había secuestrado a su hija, para asegurarse que el Destructor no interferiría en sus planes, sin embargo, el imperativo genético de Drax era demasiado fuerte, y ni la amenaza sobre la vida de su hija le hizo desistir de la búsqueda de Thanos, su gran enemigo.

En ese breve periodo de calma, se produjo la llegada de Praxágora, llevando el comatoso cuerpo del Super Skrull que fue rápidamente llevado a la enfermería que compartía entre otros cientos de heridos, con el Señor del Fuego.

La calma duró poco, ya que entonces se produjo la llegada de Voraz, acompañado de Terrax, cuya utilidad tras la captura de Galactus había desaparecido, Paibok el energo Skrull, capturado en algún momento de la guerra y el Elan conocido solo como Delincuente, todos ellos infectados por bichos controladores que le obligaban a servir a la Oleada Aniquiladora, los cuatro contaban con la ayuda de un androide de aspecto similar a los que usaba el Pensador Loco.

Los cinco se enfrentaron a los pesos pesados de la resistencia, es decir, a Nova, Ronan, Drax, Praxagora y Gamora, pronto ayudados por la llegada de Polvo de Estrellas y Batocromo. Sin embargo, la batalla únicamente tenía el objetivo de distraer a las fuerzas de la resistencia, y usar la tecnología teleportadora de Thanos para trasportar a las tropas de élite de Annihilus, los Centuriones, al corazón de la batalla. Con la presencia de Voraz y los Centuriones en el interior de sus filas, y el ataque del resto de la Oleada, provocaron que las filas de la resistencia se quebraran.

Pese a la inminente derrota, Nova y sus compañeros continuaron luchando, intentando ganar tiempo para evacuar el mayor número posible de soldados. El único punto positivo lo puso la milagrosa recuperación del Super Skrull, que absorbió la energía desplegada por el combate entre Ronan y el Señor del Fuego contra Voraz para recuperarse.

Sin embargo, el Super Skrull hubo de unirse a Nova y el resto de miembros de la resistencia en su apresurada huida, ya que la llegada de Annihilus presagiaba una pronta destrucción. Efectivamente, Thanos había logrado crear un artefacto con el que controlaba a Galactus, de modo que le obligaba a destruir un planeta para alimentarse, pero en vez de fluir la energía cósmica hasta el Devorador de Mundos, esta era derivada a contenedores para el posterior uso de Annihilus.

El soberano de la Zona Negativa decidió hacer de la rebelde Daedalus 5 la primera víctima de su nueva arma, y ordenó la retirada de sus tropas, tas lo cual comenzó la destrucción del planeta. Frente a el poder de Galactus se alzaron sus dos antiguos heraldos, Polvo de Estrellas y Batocromo interpusieron su poder y su cuerpo para retrasar la destrucción del planeta, dando a Nova y sus compañeros el tiempo necesario para escapar antes de la destrucción de Daedalus.

¿Todos?, no, Drax se infiltró entre las tropas de la Oleada, hasta que logró llegar a Caul 7, donde se enfrentó a Extirpia, a la que asesinó, y después usó nave para marchar al encuentro de la flota de Annihilus, donde sabía que encontraría a Thanos.

La resistencia como tal había sido destruida, más de un tercio de sus fuerzas habían muerto en Daedalus, dos de los heraldos habían muerto, Drax había desaparecido, Gamora abandonó la resistencia dispuesta a comenzar una guerra de guerrillas contra las fuerzas de la Oleada....

Ronan por su parte, marchó a Hala acompañado por el Super Skrull y Praxagora, dispuesto a derrocar a la casa Fiyero y asumir personalmente el mando de las operaciones contra la Oleada Aniquiladora. En Hala, Ronan descubrió que los miembros de la casa Fiyero habían pactado con Annihilus, y que el propio Voraz actuaba como protector de los líderes Kree. Ronan y sus dos aliados lucharon contra Voraz y sus Centuriones, obligándoles a retirarse.

Sin sus protectores, los líderes de Fiyero imploraron piedad, pero Ronan los juzgó culpables y procedió a ejecutarlos, dado que Fiyero había sido ejecutada, y la Inteligencia Suprema había sido "incapacitada", Ronan fue elegido monarca por aclamación.

Por su parte, y viendo que no podrían vencer en una guerra convencional, Nova decidió lanzar un ataque con un pequeño comando, para acabar con el líder de la Oleada, este comando lo formaría el propio Nova, Star Lord y Phila, pero para alcanzar a Annihilus debían usar tecnología teleportadora de corto alcance, lo que impedía una acción inmediata, esta tecnología les fue otorgada por Blastaar, antiguo monarca en la Zona Negativa, y enemigo ancestral de Annihilus, junto a él, los Caballeros del Espacio, la única célula de resistencia activa que actuaba al margen de Nova y sus soldados.

En su nave insignia mientras tanto, el soberano de la Zona Negativa saboreaba su victoria, sin embargo, Dragón Lunar logró leer la mente de Annihilus y descubrir sus verdaderas intenciones, acabar con toda la vida tanto en este Universo como en la Zona Negativa. Cuando Heather le mostró a Thanos las verdaderas intenciones de su "aliado", el Titán comprendió que debía detenerle. Precavido como era, Thanos había instalado un mecanismo de seguridad en el artefacto que aprisionaba a Galactus, mecanismo que solo podía ser activado por él tras un complicado sistema de apertura, y que debía ser rematado por una poderosa descarga de energía.

El titán se dispuso a liberar a Galactus, pero entonces se produjo la desafortunada llegada de Drax, dispuesto a acabar con Thanos y liberar a su hija, poniendo en peligro la salvación del Universo. Ni las suplicas de Heather, ni el campo de fuerza personal de Thanos detuvieron a Drax, que arrancó el corazón del titán matándolo, cuando este se disponía a lanzar la descarga que liberaría a Galactus.

Solo después de haber matado a Thanos, comprendió Drax las verdaderas intenciones del titán, y dado que ellos carecían del poder necesario para activar el mecanismo que liberaría a Galactus, sacaron a Estela Plateada de su encierro, y este proporcionó la energía necesaria para liberar a su señor, un Galactus más furioso y hambriento de lo que había estado jamás, una oleada de energía cósmica surgió del devorador, destruyendo la nave insignia de Annihilus y al grueso de la Oleada Aniquiladora.

En la órbita de Hala, el Imperio Kree peleaba por su supervivencia, la Oleada Aniquiladora había alcanzado el corazón del Imperio debido a la ineptitud y la traición de la casa Fiyero, pero ahora, bajo el mando de Ronan, el signo de la guerra no tardaría en cambiar. El propio Ronan dirigió la carga definitiva contra los atacantes de Hala, privados de refuerzos por lo que sería conocido como "el episodio Galactus", la Oleada, ahora dirigida por Voraz, hubo de batirse en retirada.

En el espacio mientras, Annihilus había logrado sobrevivir al ataque de Galactus gracias a su increíble reserva de energía cósmica, pero sobrevivir le había costado agotar todo el poder cósmico, y pretendía retirarse para recuperarse y volver a atacar una vez recuperado. Sin embargo, Nova y sus aliados no estaban dispuestos a permitir a Annihilus escapar sin castigo, y tras dejar a Star Lord y Phila encerrados en una burbuja de energía, Nova atacó a la Muerte que Camina, pero este todavía poseía su propio poder, además de contar con el poder de las banda cuánticas robadas a Quasar. Annihilus abatió a Nova, y se dispuso a acabar con él, entonces entró en acción Phyla, que logró arrebatarle las bandas cuánticas aunque ni así pudo derrotar al villano que noqueó a la joven.

Sin embargo, Annihilus había agotado su poder cósmico para sobrevivir al ataque de Galactus, había perdido las bandas cuánticas a manos de Phyla y ahora solo se mantenía con su propio poder, esto igualaba las tornas y Nova logró someter al maligno, y le arrancó las tripas a través de la abertura de la mandíbula. La guerra de Aniquilación había terminado.

Sin embargo, las causas de la guerra todavía se dejan notar.

La guerra había durado 222 días, en los que millones de seres vivos habían perecido, cientos de planetas habían sido destruidos, las Kyln eran solo ruinas, el Imperio Skrull se había prácticamente extinguido, el cuerpo Nova había desaparecido, el armisticio firmado entre la resistencia y las fuerzas de Annihilus, ahora dirigidos por Voraz, otorgaba a las fuerzas de la Zona Negativa los mundos bajo dominio Skrull y les daba parte de los territorios Kree, entre ellos Kree-Lar la antigua capital, a Voraz el cual se lo dio a los Centuriones que gobernaban en ellos como reyes, sin embargo estos pronto se verían acosados por el Señor del Fuego, que los buscaba a todos y cada uno, dispuestos a cobrarse venganza por los crímenes cometidos por estos durante la guerra de Aniquilación.

Concretando algo mas, la Oleada había acabado con la vida de Quasar, de todo el cuerpo Nova, de Batocromo, de Polvo de Estrellas (aunque más tarde este volvería a la vida) y otros menos conocidos como Preak o Tana Nile. Menos lloradas serían las muertes del instigador de la guerra, Annihilus, y de su aliado, el tal vez más malvado aún Thanos, aunque en la Zona Negativa Voraz presidiría una inquietante ceremonia en la que se intuía el nacimiento de una nuevo Annihilus.

Tras permanecer cautivo de Annihilus, Galactus tenía una necesidad de alimentarse mucho mayor que la que tuvo antaño, su nuevo heraldo era Estela Plateada (aunque pronto adoptaría un segundo heraldo en la figura de Polvo de Estrellas, tal era su necesidad de alimento), además debían tener en cuenta a los dos antiguos dioses, Aegis y Tenebroso, que no tardarían en descubrir que Galactus no había fallecido a manos de Thanos y buscarían venganza contra el Devorador de Mundos

Los supervivientes de la guerra vieron alterado su status de antes del conflicto, Nova se había convertido en el único superviviente del Cuerpo Nova, y ahora era portador de la

Mundo Mente Xandariana, Drax había conseguido el propósito para el que fue creado y daba sentido a su vida, matar a Thanos, quedaba por ver que haría a continuación, curiosamente por fin había logrado librarse de su inseparable Cami, la niña, lejos de volver a la Tierra, fue llevada a un lugar seguro por Gamora y ahora estaba acompañada por Skreet, la diminuta mascota de Thanos, Ronan el Acusador había sido coronado como nuevo dirigente de los Kree, y su primera tarea debía ser reconstituir el Imperio, y reforzar la seguridad para evitar nuevos ataques contra el Imperio, contaba con el asesoramiento de Star Lord, y el Super Skrull y Praxagora continuaban juntos, aunque quedaba por ver la función del guerrero Skrull ahora que su pueblo se había prácticamente extinguido, Phyla continuaba junto a Dragón Lunar, y había decidido adoptar el manto de Protector Cósmico del fallecido Quasar.

Todos ellos deberían superar una nueva prueba para hacer frente a la amenaza de la Falange, que provocaría que volvieran a aliarse para combatir a un enemigo común.