Vengadores Secretos

Después de la masacre de Stamford en las que murieron casi ochocientos inocentes durante una batalla entre unos supervillanos y el grupo de héroes conocido como los Nuevos Guerreros, la sociedad exigió a las autoridades que pusieran coto a la libertad de acción a los super hombres. Esto desembocó en la aprobación por parte de las autoridades del Acta de Registro Superhumano, que regulaba las actividades de los super hombres obligándoles a ponerse al servicio de las autoridades, revelando sus identidades secretas y siendo necesario acreditar que estaban debidamente entrenados para usar en público sus poderes. Dentro de la comunidad superheroica, la ley provocó diversidad de opiniones, unos se mostraban a favor, otros en contra y los demás no tenían clara que actitud tomar.

El gobierno tanteó por medio de Maria Hill, nueva líder de SHIELD, al Capitán América, al cual convocó a una reunión en el Helitransporte, para que se pusiera al mando de los Vengadores para capturar a aquellos héroes reticentes a aceptar el Registro de Super Humanos, el Capitán América se negó puesto que si bien creía que los super hombres debían estar debidamente entrenados, opinaba que no debía ser el gobierno quien regulara sus actividades. La negativa no era una opción y Maria Hill se dispuso a capturar al Capi que hubo de luchar para escapar del Helitransporte. Perseguido por las fuerzas de SHIELD especialmente creadas para la captura de los super hombres, los llamados Mata Capas, el Capitán América se refugió en uno de los refugios secretos que le proporcionó Nick Furia. Allí fue encontrado por el Halcón que iba en busca de su antiguo compañero, Willson convenció al Capi (reticente a enfrentarse al gobierno) que debían oponerse al gobierno y que otros muchos pensaban como él.

Tras un fallido intento de reclutar a Hank Pym, pronto logró que se les uniera Puño de Hierro (disfrazado como Daredevil) y juntos ayudaron a Luke Cage a escapar de los Mata Capas que fueron a su casa a capturarlos. En la vorágine de la huida, Cage lanzó la proclama que dio inicio a la Guerra Civil super heróica, “llega la revolución”.

Con la figura del Capitán América como icono, se reunió un grupo de super héroes que se oponían al Acta de Registro.

Este grupo adoptó el nombre informal de Vengadores Secretos del Capitán América y estaba formado sobre todo por jóvenes que idolatraban al Capi (caso de Justicia o de los Jóvenes Vengadores, rescatados por el Capi y sus compañeros después que fueran capturados), amigos de él (Hércules, Hombre D) y otros cuyas convicciones les impedían aceptar la imposición del gobierno (Cable, Capa, Puñal). Además de héroes, los Vengadores Secretos contaban con otros apoyos no superheróicos como eran Sharon Carter, Nick Furia (que facilitó bases ocultas y documentaciones falsas) además de Jane Foster y una de las Enfermeras de Noche que daban asistencia médica a los héroes. Frente a ellos se alzaban además de las fuerzas del gobierno, los héroes que estaban a favor del Acta de Registro, todos ellos liderados por Iron Man.

Después que los mutantes decidieran mantenerse en un plano de neutralidad los bandos estaban claramente definidos, los Vengadores Secretos llevaron acciones de guerrilla ayudando a otros héroes a escapar de las fuerzas gubernamentales lo que llevó a enfrentamientos contra las fuerzas de Iron Man además de continuar sus actividades super heroicas siempre cuidando de no ser capturados. Otro de sus objetivos era el de liberar a aquellos que se oponían al Acta y que habían sido capturados, su primer y exitoso plan fue la liberación de los Jóvenes Vengadores interceptando el transporte que los llevaba hacia un portal a la prisión de la Zona Negativa. Desgraciadamente, el segundo intento terminó en una batalla campal en la Calle Yancy en que un inocente murió.

Iron Man por su parte, urdió un plan para reunirse con el grupo del Capitán América e intentar convencerle que cambiara su actitud y en caso de no lograrlo, capturar a los rebeldes. Tras lanzar una falsa alarma que convocó a los Vengadores Secretos a una fábrica abandonada propiedad de Industrias Stark, Iron Man intentó convencer al Capi de lo acertado del Acta de Registro, desgraciadamente, su modo de acercarse no fue el mas adecuado ya que su primera acción fue la de atacar a traición a los Vengadores Secretos noqueando a sus teleportadores (Capa y Wiccan). Pero la persecución gubernamental y las traiciones que habían sufrido por parte de amigos habían hecho que el Capi desconfiara del que fuera su amigo y en lugar de aceptar la mano extendida que le ofrecía Iron Man, el Capi le colocó un dispositivo que desbarataba los instrumentos computerizados de Stark lo que dio comienzo una batalla entre ambos bandos. La pelea estuvo a punto de acabar cuando Iron Man usó su armadura para crear un rayo sónico que noqueó a casi todos los Vengadores Secretos, incluso así, el Capi intentó defenderse pero Stark aprovechó su ventaja para imponerse dándole una paliza de aupa. Cuando Stark se disponía a capturar a Rogers, entró en acción Hércules cuya condición física olímpica le permitió sobreponerse al rayo sónico de Iron Man y destruir el arma liberando a sus compañeros. Entonces las fuerzas de SHIELD activaron al clon de Thor, robot fabricado por Pym y por Stark a partir de muestras genéticas obtenidas de Thor. El robot se enfrentó a los Vengadores Secretos pero debido a su condición robótica, carecía de escrúpulos y cuando se enfrentó al Goliat Negro, usó su dominio sobre el rayo para abatir a Bill Foster que cayó muerto. Con la muerte de Goliat Negro, la Mujer Invisible, que ya albergaba dudas sobre su apoyo al Acta, usó sus poderes para permitir a los Vengadores Secretos escapar. Esa misma noche, Susan Richards y su hermano Johnny abandonaban los 4 Fantásticos y se unían a los Vengadores del Capi.

La muerte de Foster provocó un cambio en la manera de pensar de muchos de los héroes indecisos e incluso alguno de los aliados de Stark (por ejemplo Spiderman) que se unieron a los Vengadores Secretos, por su parte unos pocos como Estatura, Cable o Halcón Nocturno abandonaban al Capi al considerar que no debían continuar la lucha. Al poco, el grupo tuvo una nueva incorporación, aunque no era del agrado de todos, se trataba del Castigador que salvó la vida de Spiderman cuando abandonó a las fuerzas de Stark y fue perseguido por los Thunderbolts. El Castigador duró poco en el grupo puesto que fue capturado después que asesinara a un grupo de villanos que intentaba unirse a los Vengadores Secretos al no estar de acuerdo con el Acta de Registro, pero en el breve lapso de tiempo en que estuvo en los Vengadores Secretos se infiltró en la base de los 4 Fantásticos y obtuvo los planos de la prisión de la Zona Negativa donde se encerraba a los que se oponían al Acta.

Tras una última tentativa de arreglar las cosas entre el Capi y Stark, el Rogers comenzó a ultimar sus planes, tras recabar la ayuda de Namor y de Pantera Negra y su mujer comenzó a actuar. Hulkling ocupó el puesto de Chaqueta Amarilla y se infiltró en las fuerzas de Stark al tiempo que el Capi y el resto de los Vengadores Secretos usaba el portal a la Zona Negativa para llegar a la prisión. Allí fueron emboscados por Stark y sus fuerzas que pensaban que por fin había capturado al Capi y los suyos, pero entonces Hulkling descubrió su tapadera y abrió las celdas liberando a todos los prisioneros. Comenzó una lucha entre los Vengadores Secretos y los seguidores de Stark, Capa usó su poder para abrir un portal que trasportó a todos los contendientes hasta las calles de Nueva York donde dio comienzo una batalla campal agravada con la llegada de Namor y sus atlante por parte de los aliados del Capi y por los Campeones y el clon de Thor por parte de las fuerzas de Stark. Finalmente, los líderes de ambos bandos se enfrentaron en combate individual, normalmente la armadura de Iron Man le hubiera dado una clara superioridad en el combate pero entonces la Visión usó sus poderes de intangibilidad para desbaratar los sistemas de la armadura de Stark permitiendo al Capi tomar ventaja. Cuando Rogers se disponía a rematar a Iron Man, un grupo de civiles lo agarró e intentó detenerle, el Capi sorprendido comprendió entonces toda la destrucción que habían causado en su pelea y que el Acta era lo que el pueblo americano quería, por ello ordenó a los Vengadores Secretos que detuvieran la pelea y se entregó a las autoridades.

Con la captura del Capitán América, los Vengadores Secretos se disolvieron, muchos de sus meimbros aceptaron la amnistía presidencial, solo unos pocos (caso de Luke Cage o Spiderman), siguieron en la clandestinidad formando los Nuevos Vengadores. Acabada la guerra civil, los acontecimientos se sucedieron, el Capitán América fue “asesinado”, se produjo la invasión de la Tierra llevada a cabo por los Skrulls y la posterior caída en desgracia de Stark y el ascenso al poder de Norman Osborn.

El retorno del Capitán América y la crisis conocida como Asedio provocó el fin de Norman Osborn y la vuelta al status anterior a la aprobación del Acta de Registro, tras esto el Capi reunió en torno a él a un nuevo grupo de Vengadores Secretos que opera en la actualidad de manera paralela al grupo oficial para realizar operaciones encubiertas.